Son muchas las empresas que, para mejorar sus resultados, se plantean cómo pueden reducir costes logísticos. Si tú también quieres saber cómo hacerlo no te pierdas el siguiente post ya que te damos varios consejos para que puedas conseguir tu objetivo.
Reducir costes logísticos: tips para conseguirlo
La logística puede suponer entre un 20 y un 30% del valor de la mercancía. ¿Conocías este dato? Como podrás comprobar es tal su peso dentro del valor total que aumentar los costes en este área puede hacernos perder competitividad. Para mejorar la eficiencia del sistema logístico y, por ende, poder reducir los costes asociados a él se pueden seguir una serie de consejos que te presentamos a continuación.
Una planeación adecuada permite que el producto sea entregado a tiempo y al menor costo posible
Para reducir costes en la operación, es necesario realizar una planificación adecuada, con la ayuda de herramientas de software. Esta estrategia implica conocer bien la distribución de la demanda en todo el mercado objetivo, así como de la disponibilidad de los medios de transporte. Esto facilitará una entrega más ágil y sin contratiempos, con el fin de evitar devoluciones por retrasos, así como el costo que genera el traslado de la mercancía.
Optimización del espacio del almacén
La organización de las mercancías y la optimización del espacio del almacén ayuda a minimizar costes. Una buena gestión de almacenes no solo mejora la productividad de los empleados, también aumenta la satisfacción del cliente.
Una gestión eficiente del almacén permite aprovechar mejor el espacio disponible. Esto permite minimizar el área de maniobra de la mercancía. Para lograrlo, es importante contar con sistemas de gestión de almacenes (WMS, por sus siglas en inglés). Estas herramientas permiten organizar los productos en el espacio disponible.
Otro punto importante es la seguridad de la mercancía. Una buena planificación y organización del almacén no solo garantiza una reducción de costos, también protege el producto de posibles pérdidas, lo cual podría traducirse en costes ocultos, como el pago de seguros.
Minimizar los errores es una tarea clave
Las tareas operativas de almacén están muy expuestas a los errores y la información que manejan es esencial para la eficiencia de la operación.
Los sistemas de gestión de almacenes facilitan la estandarización de las tareas y procedimientos para que los colaboradores se enfoquen en las actividades que agregan valor. Asimismo, el WMS también permite identificar los puntos débiles de la operación para que, de forma organizada, se tomen las medidas pertinentes para mejorarlos.
Optimizar el proceso de carga y descarga
La forma en que se realiza la carga y descarga de un vehículo puede generar costos innecesarios. Es necesario tener en cuenta que el traslado de mercancías no solo implica un gasto de combustible, sino también puede implicar costes como el tiempo de espera en la carga y descarga, los costos asociados al manejo de la mercancía, etc. La gestión de almacenes permite aprovechar al máximo el espacio disponible para el almacenamiento. Esto facilita la organización de la mercancía y la agilización de los tiempos de carga y descarga. Además, permite evitar la ruptura de la cadena de frío en el caso de mercancía refrigerada, lo cual facilita que el producto sea trasladado a su destino en las mejores condiciones.
Optimizar el espacio de carga
Cuando los productos se trasladan en almacenes llenos, el espacio de carga disponible disminuye, lo que implica que el peso de cada caja aumente. Un producto más pesado significa un mayor gasto de combustible, costes relacionados con la amortización del vehículo, mayor desgaste en el vehículo y un mayor impacto ambiental.
Reducción de devoluciones por retrasos en la entrega
Una buena planificación en la logística ayuda a minimizar las devoluciones. Esto implica conocer bien las condiciones del producto y cómo debe ser almacenado. De igual forma, es importante aplicar la tecnología y contar con un equipo capacitado para la operación, con la finalidad de reducir los errores humanos que puedan impactar en el coste y eficiencia de la entrega.
Optimización del embalaje
Una mala elección de los materiales de embalaje puede incrementar los costes de la operación. Por ejemplo, la utilización de un embalaje inadecuado puede generar el deterioro de la mercancía y, por ende, generar devoluciones. Lo cual implica un coste más por el producto y el tiempo invertido en realizar la devolución.
Rutas más eficientes
Para la planificación de las rutas de distribución, es necesario considerar los tiempos de entrega y las zonas de mayor demanda. Esto permite generar un mayor número de envíos con menor frecuencia y reducir el recorrido por kilómetro, lo que implica un ahorro en combustible.
Estas son algunas de las acciones que puedes llevar a cabo para reducir los costes logísticos a la hora de realizar el envío de mercancías. ¿Te animas a ponerlas en marcha?