La norma Euro 7 se aplicará como pronto en 2028 a camiones y en 2026 a furgonetas

norma Euro 7

El acuerdo para la Euro 7 establece que entrará en vigor como mínimo en 2028 para camiones y en 2026 para furgonetas. Una característica innovadora de esta norma es la introducción de límites de partículas para frenos y neumáticos, mientras que no se observan cambios significativos en los límites de emisiones del tubo de escape, lo que resulta satisfactorio para los fabricantes.

Euro 7: Un vistazo al futuro de las normativas de emisiones en Europa

La Euro 7 trae consigo un cambio significativo al limitar las partículas liberadas por los frenos y neumáticos de los vehículos. Se espera que esta normativa comience a aplicarse a coches y furgonetas hacia la segunda mitad de 2026, mientras que para camiones y autobuses se prevé su inicio a principios de 2028, dependiendo de la aprobación definitiva.

Aunque el texto final aún está pendiente de formalización por parte del Consejo y el Parlamento Europeo, se ha alcanzado un acuerdo general sobre la Euro 7 que satisface a los fabricantes de vehículos. Este acuerdo se percibe como más flexible y menos restrictivo que la propuesta original de la Comisión Europea. Además, se extiende el plazo de aplicación para los vehículos fabricados por pequeñas empresas, comenzando el 1 de julio de 2030 para turismos y furgonetas, y el 1 de julio de 2031 para autobuses y camiones.

La propuesta inicial de la Comisión Europea era implementar la Euro 7 a partir de 2025 para vehículos ligeros y en 2027 para vehículos pesados. Sin embargo, el acuerdo alcanzado entre el Consejo y el Parlamento Europeo establece que la normativa se aplicará 30 meses después de su aprobación definitiva para vehículos ligeros, lo que significa que podría entrar en vigor más allá de 2026. Para los vehículos pesados, el plazo de aplicación será de 48 meses después de la aprobación, posiblemente extendiendo su implementación más allá de 2028 si surgen problemas en su adopción formal.

Además, los parámetros de la Euro 7 continuarán actualizándose después de 2035. A partir de esta fecha, no se permitirá la venta de nuevos vehículos ligeros en la UE que emitan dióxido de carbono por el tubo de escape.

La normativa sobre los tubos de escape, frenos, neumáticos y baterías

Para los turismos y furgonetas, la normativa Euro 7 mantiene las condiciones de ensayo establecidas en Euro 6, así como los límites de emisiones del tubo de escape. La principal diferencia radica en que la medición del número de partículas de escape se llevará a cabo a nivel de PN10, lo que implica la inclusión de partículas más pequeñas. En el caso de autobuses y camiones, Euro 7 mantiene las condiciones de ensayo de Euro VI, pero establece límites más estrictos para las emisiones de escape medidos en laboratorio, como un límite de NOx de 200 mg/kWh, así como en condiciones reales de conducción, con un límite de NOx de 260 mg/kWh.

La propuesta inicial de la Comisión Europea encontró una fuerte oposición por parte de la industria automotriz y de un bloque de ocho países, incluyendo Francia, Italia, República Checa, Bulgaria, Hungría, Polonia, Rumanía y Eslovaquia. Estos actores argumentaron, en línea con la Asociación de Fabricantes Automovilísticos Europeos (ACEA), que las nuevas medidas agregarían costos y obstáculos a la industria en un período de tiempo muy breve, antes de que se produzca la transición a vehículos de cero emisiones, lo que contribuyó a reducir las expectativas de la propuesta. Por otro lado, países como Dinamarca y Luxemburgo mostraron una posición más ambiciosa al respecto.

El cambio más significativo en la normativa se centra en los límites de partículas emitidas por frenos y neumáticos. En el caso de los vehículos eléctricos puros, se permite la liberación de hasta 3 mg/km, mientras que para la mayoría de los vehículos con motor de combustión interna, híbridos eléctricos y de pila de combustible, se establece un límite de 7 mg/km. Para las furgonetas con motor de combustión, se permite una liberación de hasta 11 mg/km.

Además, la normativa acordada establece requisitos mínimos de rendimiento para la durabilidad de las baterías en automóviles eléctricos e híbridos, así como en furgonetas, durante diferentes períodos de tiempo y distancias recorridas desde el inicio de su vida útil.

¿Cómo afectará a los consumidores?

La recién adoptada normativa incluye la implementación de un «pasaporte ambiental vehicular». Este documento contendrá detalles sobre el desempeño del vehículo al momento de su matriculación, proporcionando información clave como sus niveles de emisiones de CO2, su consumo de combustible o electricidad, su autonomía eléctrica y la durabilidad de su batería.

Además, como parte de la regulación, se exige a los fabricantes de automóviles que diseñen sus vehículos de manera que eviten cualquier manipulación de los sistemas de control de emisiones. Este control se realizará a través de la digitalización del seguimiento de los automóviles, garantizando así la integridad de los datos y el cumplimiento de las regulaciones ambientales.

En resumen, la Euro 7 marca un hito en las regulaciones de emisiones en Europa, abordando diversas preocupaciones ambientales y tecnológicas mientras establece un camino hacia un transporte más limpio y sostenible.