La necesidad de armonizar la normativa social en el transporte internacional

transporte internacional por carretera

El transporte internacional por carretera enfrenta, cada vez más, multitud de desafíos y la armonización de la normativa social de la UE se presenta como una solución necesaria. Las empresas del sector demandan una interpretación uniforme de las regulaciones para evitar discriminaciones y mejorar su competitividad.

Desafíos del transporte internacional

Las grandes compañías de transporte internacional están lidiando con un momento de “enorme incertidumbre”. El incremento de los costes, como los peajes de la nueva Euroviñeta que grava las emisiones de CO2 de los camiones, y la “avalancha regulatoria” han creado un entorno de inseguridad jurídica. Estas normativas frenan la competitividad del sector, que además enfrenta exigencias medioambientales de la UE, como la reducción del 90% en emisiones para 2040. El presidente de Astic, Marcos Basante, subraya la necesidad de un enfoque pragmático y equitativo, involucrando a todas las partes del sector y permitiendo una combinación de opciones energéticas sostenibles.

La unificación de convenios y la jornada laboral

En el apartado socio-laboral, José Manuel Pardo, director técnico de Astic, critica el Real Decreto que prioriza los convenios autonómicos sobre el nacional, complicando las negociaciones del III Acuerdo General de Mercancías. Astic defiende un convenio colectivo nacional único para evitar la fragmentación geográfica que afecta la negociación y la competencia entre empresas. Además, la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas propuesta por el Gobierno impactará significativamente al sector, que tiene una regulación especial para los conductores profesionales. Pardo destaca que esta medida agravará la escasez de conductores y que la jornada laboral debería establecerse mediante acuerdos entre los interlocutores sociales.

La reciente sentencia del Tribunal Supremo sobre el tiempo de descanso de los conductores también ha sido un punto de debate. Esta decisión podría perjudicar la competitividad de las empresas españolas, aumentando los costes y afectando los precios de los productos.

Innovaciones y requisitos tecnológicos

El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha fijado la obligatoriedad del eCMR (carta de porte electrónica) para enero de 2026, como parte del Proyecto de Ley de Movilidad Sostenible. Además, a partir del 31 de diciembre de este año, las empresas de transporte internacional deben contar con el tacógrafo inteligente de segunda generación en sus vehículos de más de 3,5 toneladas, según recordó Alberto Pérez, director de Tacógrafos y Servicios Telemáticos en Continental Automotive Spain. Estas medidas son muy importantes para la modernización y eficiencia del sector.

La armonización de la normativa social en el transporte internacional es necesaria para enfrentar los desafíos actuales del sector. La unificación de regulaciones, junto con la adopción de nuevas tecnologías, permitirá a las empresas mejorar su competitividad y cumplir con las exigencias medioambientales y laborales, asegurando un futuro sostenible y eficiente para el transporte por carretera.