
El transporte por carretera en España sigue mostrando cifras de crecimiento, aunque moderado. En 2024, la facturación creció un 2,4% respecto al año anterior, alcanzando los 17.875 millones de euros. Este incremento refleja un sector resiliente y con tendencias de consolidación, aunque persiste una notable atomización entre las empresas.
Facturación y crecimiento del sector en 2024
En 2024, el sector del transporte por carretera en España logró una facturación de 17.875 millones de euros, un 2,4% más que en 2023, cuando alcanzó los 17.450 millones de euros. Este crecimiento, aunque positivo, se situó ligeramente por debajo de la inflación del 2,8%, reflejando un aumento del volumen de negocio similar al registrado en 2023 (2,6%).
Según el informe de la consultora Informa, estos resultados demuestran la estabilidad del sector pese a los retos económicos y logísticos que enfrentan las empresas. Sin embargo, los datos de facturación de 2024 aún son provisionales, por lo que podrían ajustarse en próximas revisiones.
El fenómeno de concentración empresarial ha sido un aspecto destacado en los últimos años, impulsado por adquisiciones y fusiones significativas, como la de Acotral y Ontime en 2021. A pesar de ello, las diez mayores empresas solo concentran el 23,4% del total de la facturación, lo que evidencia una estructura de mercado muy fragmentada. Esta situación contrasta con otros países europeos, como Portugal, donde las diez principales empresas abarcan el 33% del negocio.
Atomización del mercado y distribución territorial
El mercado español del transporte por carretera está marcado por su atomización. Aunque se han registrado avances en la concentración empresarial, como las adquisiciones por parte de ESP Solutions, la mayoría de las empresas son de pequeño tamaño o están operadas por autónomos. De hecho, Informa destaca que gran parte de los transportistas explotan un único vehículo, lo que limita su capacidad competitiva en un mercado globalizado.
En 2023, se registraron cerca de 117.500 empresas de transporte por carretera en el mercado ibérico, de las cuales 109.600 estaban en España y aproximadamente 8.000 en Portugal. En el ámbito nacional, cinco comunidades autónomas concentran más del 60% de las empresas: Cataluña (18,6%), Andalucía (14,7%), Madrid, Comunidad Valenciana y Castilla-La Mancha. Esta distribución geográfica subraya el peso económico y logístico de estas regiones en el sector.
La alta participación de autónomos y pequeñas empresas también contribuye a la fragmentación del mercado, lo que puede dificultar la competitividad frente a otros modelos más consolidados en Europa. Sin embargo, también representa una ventaja al ofrecer mayor flexibilidad y adaptabilidad a las necesidades locales y regionales.
En resumen, el transporte por carretera en España muestra un crecimiento estable, con una facturación que refleja la fortaleza del sector pese a su marcada atomización. Aunque la concentración empresarial avanza lentamente, el mercado sigue dependiendo en gran medida de pequeñas empresas y autónomos, lo que plantea retos y oportunidades en su futuro desarrollo.